El objetivo del taller es utilizar la música para ayudar a los niños a estimular, crear, y potenciar sus capacidades a la vez que se les invita a adquirir mayor conciencia de si mismos y de los demás.
A todos nos gusta la música. A unos les gustan unos estilos y a otros, otros, pero casi todo el mundo disfruta con la música y los niños, más.
La Musicoterapia es una estupenda aliada para incentivar el aprendizaje, la capacidad comunicativa, la relajación o la expresión corporal, entre otros factores. Ayuda a conseguir cambios de comportamiento desde la conciencia de los propios recursos.
Objetivo:
¿Qué intentamos potenciar?
- Influye muy positivamente en el estado de ánimo. ¿Quién no ha experimentado un cambio de humor al escuchar una melodía?. Las notas musicales llegan muy hondo y siempre las asociamos a situaciones o recuerdos, cuando las conocemos, o nos sugieren alegría, tristeza o cualquier otro sentimiento cuando las oímos por primera vez. Es una excelente manera de llegar a las emociones de grandes y pequeños.
- Mejora la autoestima del niño.
- Constituye una ayuda como tratamiento de dolores crónicos y enfermedades. En concreto, es muy efectiva con los niños con diferentes patologías.
Contenidos:
Las sesiones, ¿en qué consisten?
Las sesiones de musicoterapia varían en función del niño o grupo pero tienen muy en cuenta la importancia de aportar seguridad a los niños. En general se suele comenzar con alguna composición de bienvenida cantada para que se sientan cómodos.
Proponemos diferentes actividades:
- Cantar es una de las principales herramientas para aumentar el conocimiento de vocabulario y de la composición lingüística de las oraciones.
- Escuchar música es clave para incentivar la atención, reconocer sonidos nuevos y ya conocidos y, cuando la música se preste a ello, relajarse.
- Organizar juegos en los que la música sea protagonista.
- Dar vía libre a la improvisación dejando que el niño cante o toque algún instrumento. Se afianzará su personalidad, al otorgarle libertad de comportamiento y elección, siempre y cuando se mantengan unos límites básicos. Esta es una de las actividades de musicoterapia que fomenta la creatividad.
- Dedicar un momento a componer canciones reforzando de nuevo la creatividad. De este modo al niño se le dan alas para dejar volar su imaginación.
- Propiciar que la música le transporte a otro lugar.
- Tocar cualquier instrumento para desarrollar las funciones motrices y, al hacerlo en grupo, establecer turnos, respetarse, relacionarse con los demás.
- Hacer ejercicios rítmicos con el objetivo de mejorar coordinación y resistencia física.