Gabinete Akro - Psicología Infantil y Adolescente

DE VUELTA AL COLE!

                      Los primeros días de curso son un momento delicado, que se debe presentar al niño como una oportunidad, y no como una obligación. Desde el gabinete de psicología Akro te ofrecemos algunos trucos y consejos.

                      El primer día es una prueba de fuego tanto para el niño como para los papás. Es normal que el pequeño sienta desconfianza, miedo o sensación de abandono al principio. Sin embargo, es importante que la mamá (el papá, los abuelos, el canguro o cualquier figura de referencia del niño) esté presente durante los primeros días, que serán de transición, así como que le transmita la idea de que la asistencia al colegio o guardería es una oportunidad para aprender y relacionarse con nuevos amiguitos, un lugar en el que aprenderá muchas cosas nuevas y donde también se divertirá mucho. Consejos para superar los primeros días: desde el gabinete Akro pensamos:

            1. La persona que se encargue de la “adaptación” del niño hará de intermediario entre el niño y el nuevo entorno, procurando sobre todo que el pequeño les coja confianza a los cuidadores o profesores.

           2. Los papás del niño deberán estar seguros y convencidos de la decisión, para transmitir tranquilidad, confianza y entusiasmo al pequeño. Esto favorecerá la adaptación del niño. El niño percibe y absorbe la ansiedad de sus padres.

             3. Si, antes de iniciar la escolarización, el niño ya está acostumbrado a separarse de la madre será una gran ventaja. Y es que el miedo a la separación, al abandono es una de las principales dificultades para el niño.

             4. Además, la separación de la madre es más fácil de asumir si se hace de un modo gradual. Por lo que este “entrenamiento” previo puede hacerse en mejores condiciones.

             5. Durante el rato que la mamá esté ausente, es recomendable que el niño esté con algún familiar o alguna persona conocida con la que tenga trato y confianza, y se sienta a gusto.

             6. Se puede empezar por ratos cortos y cada vez alargar más la separación, hasta que se conviertan en toda una tarde. Llegados a este punto, el niño estará preparado para “enfrentarse” a la escolarización.

            7. La despedida puede ser uno de los peores momentos del primer día. Hay que evitar irse de “hurtadillas” cuando el niño está despistado, ya que el niño podría vivirlo como un abandono.

           8. Es bueno proporcionar al niño unas palabras breves de despedida para consolarle, pero sin alargar el momento en exceso. Además, no hay que sucumbir a los llantos del niño y pataletas del niño, ni ofrecerle golosinas u otros “premios” para que se calme.

                Aun así es normal que los niños lloren al principio, poco a poco se irán acostumbrando a que sus papás vienen luego a por ellos. Los profesores y profesional también deben mirar la emoción de ese niño, de nada servirá reñirles, ridiculizarlos o tratarlos de forma inferior o despectiva. Si este proceso se alargara más de lo normal es recomendable consultar al tutor del niño o a algún profesional. Ánimo a todos los papás y mamás con los comienzos.